Música para el domingo

 

    Höchsterwünschtes Freudenfest, BWV 194 (Altamente deseada fiesta de alegría). Fue estrenada en Störmthal el 2 de noviembre de 1723 y el motivo era la inauguración de un órgano en esa localidad. Sin embargo, el maestro retomó la obra y la dejó como para el domingo de la Trinidad, día que en el calendario luterano da comienzo a la numeración de los domingos. Esta cantata procede de otra profana, numerada como BWV 194a. Bach fue convocado a probar el órgano y quedó tan satisfecho que compuso esta obra, en la que el instrumento no tiene ningún papel solista. El libretista es anónimo pero se basa en la oración de Salomón para la dedicación del templo.

    Es el intento más relevante del maestro por adaptar una suite instrumental a una cantata. Se abre con una obertura francesa, con la sección lenta encargada a la orquesta y la rápida al coro. Tras ese primer como viene un recitativo que conduce a un aria en forma de pastoral. Otro recitativo nos lleva a otra aria esta vez en forma de gavota, para terminar esta parte de la obra con un coral. Vuelve la segunda parte con un recitativo y luego un aria en forma de giga y, tras otro recitativo, otra en ritmo de minueto. La cantata termina con un coral (en ritmo de pasapié). Como ves, la estructura de suite está llevada hasta casi el extremo.

Feliz domingo