Miércoles XXVIII del Tiempo Ordinario

 

Esto es lo que había que practicar aunque sin omitir aquello
Lc 11, 42-46

¡Oh Señor, que vuestros caminos son suaves!
Mas, ¿quién caminará sin temor?
Temo de estar sin serviros,
y cuando os voy a servir, no hallo cosa que me satisfaga,
para pagar algo de lo que debo.
Parece que me querría emplear toda en esto,
y cuando bien considero mi miseria,
veo que no puedo hacer nada que sea bueno,
si no me lo dais Vos.

Teresa Sánchez de Cepeda Dávila y Ahumada, 1515-1582
(santa Teresa de Ávila)



A Fernando e Iñaki en el día de su aniversario de bodas.




Comentarios

Entradas populares de este blog

Lunes XVIII del Tiempo Ordinario

Va de libros

Cristianos en Zaragoza