Viernes XIX del Tiempo Ordinario

 

Por la dureza de corazón permitió Moisés repudiar a las mujeres;
pero, al principio, no era así
Mt 19, 3-12

    Que dos personas se comprometan no solo en matrimonio, sino a una vida de amor mutuo en imitación de Cristo es tan asombroso, tan misterioso, que se acerca al amor obstinado de Jesús por la iglesia.



Comentarios

Entradas populares de este blog

Música para el domingo de Pentecostés

Cristianos en Zaragoza

18 de agosto de 1936...