Martes IV de Pascua

 

Yo y el Padre somos uno
Jn 10, 22-30

Tú me conoces y me acoges, Jesús.
En tu corazón hay sitio para mis dudas, mis sueños, mis caídas...
Tú estas siempre disponible para encontrarte conmigo.
Y me siento feliz siguiéndote, estando contigo, escuchando tu voz, haciendo mía tu causa.


A mi hermano en el ministerio, Emilio Alejandro, de la Iglesia Ortodoxa Rusa,
en el VI aniversario de su ordenación presbiteral.




Comentarios

Entradas populares de este blog

Va de libros

Música para el domingo de Pentecostés

Orar por los difuntos...