Domingo II de Pascua

 

Tomás respondió: "¡Señor mío y Dios mío!"
Jn 20, 19-31

Jesús, siempre vivo, creo en ti.
Ayuda a mi fe a ser total y sin reservas.
Que tu presencia cerca de mí haga mi fe más alegre.
Concédeme una fe humilde, capaz de confiar en ti, incluso en los días malos.


FELIZ PASCUA ¡ALELUYA, ALELUYA!


Comentarios

Entradas populares de este blog

Lectura para el Tiempo de Adviento

Va de libros

Lunes XVIII del Tiempo Ordinario